En 2020, la automoción española enfrentó cambios con la pandemia y el Brexit. El Acuerdo de Comercio entre la UE y el Reino Unido busca aliviar desafíos, pero normas y procedimientos aduaneros generan obstáculos logísticos. Aunque clave, el acuerdo plantea desafíos administrativos para empresas acostumbradas al comercio intra-UE.
Los tiempos que vivimos son momentos llenos de incertidumbre y de cambio, tanto en el plano personal de nuestras realidades cotidianas, como indudablemente en el plano económico y empresarial, fruto del impacto de la COVID-19 en nuestras vidas. A esta realidad, el sector de automoción español no resulta ajeno. Durante estos meses hemos visto cómo se paralizaba toda la cadena de suministro en su conjunto derivado de las medidas adoptadas para atajar la crisis y la pandemia en todo el mundo.
Cuando apenas queda poco más de un mes para que acabe este tan atípico y complicado 2020, el cual ha abocado a la automoción a abordar transformaciones significativas, el sector se pregunta ¿qué se espera del último trimestre del año?
Pese a la situación de incertidumbre que vivimos a nivel mundial, las exportaciones de los proveedores españoles de automoción registran un aumento de las ventas, respecto al primer cuatrimestre del año 2020.